En la sección “Noticias sobre los testigos de Jehová” hay artículos que tratan sobre nuestros hermanos rusos, que se están manteniendo leales a pesar de la persecución. A muchas personas les ha animado leer estos artículos. Por el momento, solo tres de ellos se han traducido al tetun dili, un idioma de Timor Oriental. En uno de ellos se relata la experiencia del hermano Andréi Suvorkov. Pocos días después de que esta experiencia estuviera disponible en tetun dili, cinco jóvenes se enfrentaron a una prueba muy difícil. A continuación, ellos nos explican cómo su fe se fortaleció al meditar en este ejemplo.

Durante una ceremonia escolar, se les pidió a los jóvenes que hicieran el saludo a la bandera. Como se negaron a hacerlo, los llevaron ante el director de la escuela. Él los interrogó delante de otros profesores. Sin embargo, los jóvenes explicaron con respeto y valor las razones bíblicas que había detrás de su firme decisión.

Entonces, sin avisar a sus padres, los profesores llamaron a la policía, que se llevó a los jóvenes Testigos a la comisaría. La policía contactó con la base militar de la zona para que un soldado viniera a hablar con estos jóvenes. Para asustarlos, los policías y el soldado los encerraron en una celda durante una media hora. Después, un policía puso una pistola encima de la mesa frente a ellos y los interrogó por más de dos horas. Al final, liberaron a los jóvenes y los dejaron volver a su casa.

Cuando los padres se enteraron de lo ocurrido, hablaron con los profesores y con la policía. Pero, como siguieron presionando a los jóvenes, los padres presentaron quejas ante las autoridades locales. Finalmente, los jóvenes se vieron obligados a cambiar de escuela.

Todos estos jóvenes Testigos agradecieron mucho la experiencia del hermano Suvorkov, porque la tenían fresca en la mente cuando se enfrentaron a la oposición de compañeros, profesores y autoridades.

Noviana Jose do Carmo cuenta: “Nuestros profesores nos marginaron y fuimos expulsados de la escuela. Pero la experiencia del hermano Suvorkov me sirvió para mantener una actitud positiva”. Cejiana, la hermana mayor de Noviana, dice también: “La experiencia del hermano Suvorkov me ayudó a estar tranquila cuando nos presionaron”. Ruth Ximenes añade que la experiencia le ayudó a no rendirse.

Ananda Maria Delavega explica: “La confianza en Jehová que demostró Andréi Suvorkov me motivó a orarle a Dios y a refugiarme en él, sobre todo cuando nos presionaron”.

Roni da Cruz añade: “Saber que Jehová apoya a los hermanos por todo el mundo me dio la seguridad de que también estaba a mi lado. No había razones para sentir miedo”.

Los padres de estos fieles jóvenes también expresaron su agradecimiento por las experiencias que leyeron en la sección “Noticias sobre los testigos de Jehová”, del sitio jw.org.

Anita Ximenes, la madre de Ruth, cuida sola de sus tres hijas. Cuando escuchó a sus vecinos decir: “¡Vamos a darles una paliza a esos traidores!”, sintió miedo y angustia, y con razón. Sin embargo, Anita dice: “Saber que nuestros hermanos de Rusia se presentan ante los tribunales con una actitud positiva me llena de valor. He usado sus experiencias para enseñar a mis hijas. Vemos a Jehová como un Padre que siempre está a nuestro lado”.

El ejemplo de los hermanos que salen “completamente victoriosos” de la persecución les dio fuerzas a nuestros jóvenes de Timor Oriental y a sus padres (Romanos 8:37). A nosotros también nos fortalece meditar en su valor.